Las nuevas propuestas comunicativas exigen apuestas por la belleza, con narrativas constructivas y que partan de las mismas vivencias, experiencias y sentires de sus protagonistas-participantes. La carreta, el discurso largo, complicado y cantaletudo (retórica) ha perdido vigencia. Se requieren entonces, mecanismos de seducción con productos cortos y creativos, con encuentros de amigos, vecinos y conocidos y no de “alguien que habla” para un auditorio pasivo. El público hoy en día está pidiendo su derecho a saber la verdad, pero asimismo exige su derecho a la belleza, a esa fuerte esteticidad de la vida, al arte en los medios y las acciones, con productos que sobre todo comuniquen, independientemente de los formatos, porque lo creativo sirve en tanto sea cercano y de fácil acceso.
Partiendo de esta realidad, el curso de radio es un escenario para que el estudiante reconozca, viva y apropie los diferentes elementos de la radio como proceso esencialmente comunicativo, su historia, legislación y distribución, así como el lenguaje radial y las expresiones sonoras, con lo cual tendrá la posibilidad de planear, crear y producir piezas radiales de buena calidad audible y alto contenido.
La parte práctica se trabaja con la metodología de taller, donde es importante el interaprendizaje de los participantes del curso. Esto implica partir de la experiencia y el conocimiento que tienen los estudiantes aplicando la acción - reflexión - acción, donde se construya el conocimiento. Asimismo se integra la teoría y la práctica con el fin de obtener la claridad suficiente de los elementos que les permiten diseñar, dirigir y ejecutar proyectos comunicativos, realizar y evaluar piezas radiales y descubrir las múltiples posibilidades que tiene la radio para generar procesos de desarrollo, convivencia, construcción de ciudadanía, fortalecimiento de las identidades y sobre todo para recrear las múltiples cotidianidades que animan la vida a nivel local, regional y nacional.
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